He regresado,
y ahora sin salidas de emergencias.
Lista para apostar por los miles de te quiero,
que ya no quiero guardar.
Ahora solo deseo soltar y abrirme a ti,
así como lo hace una herida al esperar la cicatriz,
como las lobas en la noche para reinar,
como los artistas al tocar el violín,
así con toda intensidad.
Pero he de advertirte que en esta apuesta,
hará falta mucho combustible
para poder echarnos a volar,
hasta no sentir nuestros pies ni nuestras pasadas heridas.
Así que dime, ¿Estás dispuesto a amar?
Has de saber que en esta partida
puede que sea difícil deducirme,
no tengo ataduras,
soy interiormente libre,
así que todo o nada puede pasar,
y no habrá de todo esto nada que no te enrede,
dicen es el precio a pagar por amar.